El mexicano venció al inglés por KO tras ocho asaltos en la pelea por el título supermediano del WBO
Saúl 'Canelo' Álvarez derrotó este sábado por nocaut a Billy Joe Saunders en el octavo asalto, arrebatándole de esta forma su cinturón del supermedio del WBO. El mexicano retuvo sus títulos y unificó los Mundiales WBC, WBA y WBO del peso supermedio. Su próximo objetivo es conseguir el del IBF, en poder de Caleb Plant, de esta forma se convertiría en el rey absoluto de la categoría.
Canelo no lo tuvo nada fácil en un combate en el que Saunders fue de menos a más, llegando a ofrecer su mejor nivel. Desde el primer round, el inglés trató de probar la defensa del mexicano, pero Canelo llevaba continuamente la pelea a su terreno y consiguió impactar varias veces en el cuerpo del todavía campeón del WBO. Fue a partir del quinto asalto cuando Saunders cambió el rumbo del combate, el británico se soltó, encontró la distancia que no había podido conseguir en los anteriores asaltos y puso en serios problemas al púgil mexicano.
Saunders dio guerra, pero no fue suficiente, el combate estaba siendo parejo hasta que en el octavo asalto Canelo sacó toda su artillería. El de Guadalajara dejó muy tocado a Saunders tras un golpe en el pómulo y el británico se tuvo que retirar de la pelea. El golpe de Canelo fue espectacular, tras esquivar un crochet, contragolpeó con un uppercut que destrozó a Saunders. “Sentí que le quebré el ojo”, fueron las palabras que Canelo le dijo a su entrenador Eddy Reynoso en la esquina.
De esta manera, Billy Joe Saunders sufrió su primera derrota (30-1), mientras Canelo Álvarez sigue sumando victorias y títulos a su palmarés. Con un récord de 56 victorias (38 KO´s), dos empates y una derrota, el púgil mexicano podrá seguir disfrutando de su estatus de mejor boxeador libra por libra del momento.
El combate lo presenciaron un total de 73.126 personas, abarrotando las gradas del AT&T Stadium de Arlington. Lo que pasa a convertirse en un récord de asistencia en un evento de boxeo en interior en Estados Unidos, superando los 63.350 espectadores que estuvieron presentes en el combate entre Muhammad Ali y Leon Spinks en 1978.
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