¿Qué supone aceptar la política de cookies de una página web?

 Casi todos los sitios web sugieren la aprobación de estos términos


«Las cookies nos permiten ofrecer nuestros servicios. Al utilizar nuestros servicios, aceptas el uso que hacemos de las cookies». Cuando accedemos a un sitio web, quizás esta sea la frase que más aparece para así aceptar su política de cookies, pero ¿qué asumimos al aprobarlas?

 



Lo primero que debemos preguntarnos para terminar aceptando o no una cookie, es: ¿qué es una cookie? Las cookies no son ningún tipo de archivo malicioso, virus o cualquier elemento que pueda suponer una amenaza frente a la salud de nuestro ordenador. Pero sí de nuestra intimidad. 

«Una cookie son sólo datos que se almacenan en el ordenador del usuario. Pueden ser utilizadas para realizar un seguimiento de la actividad de un usuario en la Web», explica Sergio Luján Mora, informático y profesor de la Universidad de Alicante. Sin embargo, pese a poder suponer un peligro para nuestra privacidad, añade que «son un elemento imprescindible para el funcionamiento de una página web».




La función principal de las cookies es almacenar la sesión controlar el acceso de los usuarios a ciertas partes de un sitio web y mostrarle la información particular de ese usuario. Por otro lado, también existen las conocidas como tracking cookies que son las que permiten realizar seguimientos de un usuario entre diferentes sitios web. Este seguimiento permite conocer las páginas web que visitamos, durante cuánto tiempo y para fines, en la mayoría de los casos, publicitarios.

 

Hemos conocido cuáles son las funciones de las cookies, sus beneficios, sin embargo, todavía existen rumores sobre su funcionamiento que provocan miedo entre los usuarios de Internet que son totalmente falsos:

 

1.     Las cookies no son como los virus que pueden robarnos datos

2.     Las cookies no leen información personal nuestra

3.     No generan ventanas emergentes

4.     No se utilizan para generar contenido basura

5.     No solo se utilizan con fines publicitarios

 

Internet es un mundo muy grande. Hemos de ir con los ojos bien abiertos y las cookies son un ejemplo más. Un elemento que facilita la búsqueda por la web, pero con ciertos puntos a tener en cuenta. 

 

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